“El arte es espiritual, un respiro inmaterial de las dificultades de la vida” .
Fernando Botero. 

Hoy no solo la BPP está de luto, el país y el mundo entero se enfrenta a la noticia del fallecimiento de nuestro querido amigo, el maestro Fernando Botero. La partida del ilustre artista nos deja un vacío insondable, Botero fue un maestro indiscutible en el arte de la pintura y la escultura, y su estilo único y distintivo cautivó a generaciones enteras. Sus obras, con sus figuras exuberantes y su visión única de la belleza, nos recordaron la riqueza y la diversidad de la vida. Su genio creativo y su habilidad para transmitir emociones a través de sus obras lo convirtieron en un verdadero tesoro de la humanidad, su legado perdurará en nuestras instalaciones como un faro de inspiración y creatividad.

Esta es una oportunidad para agradecerle al maestro por haber caminado de la mano con nosotros y apoyar iniciativas que resaltarán el talento de los artistas de la ciudad. Así como en el 2021, cuando financió El Premio Nacional de Literatura Infantil Pedrito Botero a través de una donación realizada a la Biblioteca Pública Piloto como reconocimiento a la narrativa literaria y a la escritura de cuentos infantiles inéditos. 

Sus lienzos, esculturas y dibujos, imbuidos de un lenguaje visual único, nos transportarán siempre a un mundo donde la exaltación de la humanidad y la celebración de la vida eran temas recurrentes. Por eso, desde la BPP seguiremos siendo un espacio seguro para sus obras, ya que tenemos la fortuna de contar en nuestras instalaciones con la obra original de Pedrito Botero, y abrazaremos su arte y su visión incondicionalmente, a través de nuestra Sala Infantil Pedrito Botero. 

Su contribución al arte contemporáneo no se limitó únicamente a la expresión visual, sino que se extendió al enriquecimiento de la identidad cultural de Colombia y del mundo entero. Botero tocó las almas de innumerables personas y dejará una huella indeleble en la historia de la humanidad. Hoy abrazamos a su familia, hijos, nietos y seres queridos, porque la presencia del maestro Botero se extrañará profundamente y su legado perdurará en cada pincelada de inspiración en nuestros corazones. 

Que su arte continúe iluminando nuestras vidas y enriqueciendo nuestra comprensión del mundo que nos rodea.