Si uno de tus pasatiempos favoritos es visitar las bibliotecas de la ciudad, hay algo importante que debes saber: ¿Sabías que, en el 2019, la Secretaría de Educación realizó un estudio y de todos los préstamos de libros que se hacen durante un mes en una biblioteca solo el 5% de estos es devuelto?

Esto nos pone inquietos y te diremos por qué:

Es un hecho que las bibliotecas son espacios invaluables para nuestra ciudad. Son lugares de encuentro entre familia y amigos, de estudio para los jóvenes e incluso de trabajo y concentración para los independientes y servidores públicos. Además, que todo lo que necesitas está a tu alcance en materia de libros (físicos y digitales), revistas, periódicos y un archivo patrimonial, que somos muy afortunados de conservar para las próximas generaciones.

¿Ahora ya sabes de lo que estamos hablando, cierto? Imagina que las bibliotecas son un gran océano de conocimiento que cuando llega a la playa, no conoce otra manera más armoniosa de movimiento que el ir y venir, ir y venir. En otras palabras, dar y recibir o prestar y devolver.

Por eso, cada mes, cuando revisamos la circulación de préstamos y vemos que muchos de nuestros ejemplares no han sido devueltos, hay un vacío. Es como si el mar se hubiera quedado quieto, y sabemos muy bien qué pasaría si eso sucediera en realidad. Los libros ausentes no solo limitan la oferta de recursos disponibles en nuestras sedes, sino que también pueden generar gastos innecesarios para reemplazarlos. Esto significa que, en última instancia, que los perjudicados somos todos.

Así que, mantener viva la sinergia de los libros es vital: la biblioteca te brinda una gran posibilidad de expandir tu conocimiento y tú conscientemente devuelves el material prestado, porque sabes que muchas más personas están allá afuera esperando encontrarse con esa gran historia que tocó tu vida.

Y tranquilo, no estamos enojados, solamente queremos a todos de regreso en la #CasaDeTodos. No sobra decirlo, pero si los has visto en la calle, tomando café o viajando en el Metro, ayúdalos a volver a casa, tienen unos vecinos de estantería que también lo extrañan.